El Tizona Universidad de Burgos suma su triunfo 12+1 en un competido partido en Pamplona ante el Enerparking Basket Navarra en un encuentro donde los dos conjuntos mantuvieron opciones hasta el último instante. La aportación de Ayoze Alonso y Dídac Cuevas fue fundamental para decantar el partido de lado burgalés para seguir en lo más alto de la clasificación una jornada más y empezar el 2023 y la segunda vuelta con bien pie.
El partido comenzó con un Basket Navarra convencido de sus posibilidades, tuteando al líder y buscando mantener la imbatibilidad en su pista más allá de una vuelta entera. Thiam abría el marcador para los visitantes y Ander Urdiain hacía lo propio para colocar a su equipo por delante en los primeros compases. La igualdad fue la tónica dominante de un primer cuarto con continuos cambios de ventaja.
Navarra buscaba usar su velocidad y su dinamismo imponiendo mucha intensidad ante un Tizona que buscaba no abusar del tiro exterior como en otros encuentros y exprimir a sus torres.
La igualdad se mantuvo hasta los últimos tres minutos y medio del cuarto, cuando Ayoze Alonso se alió con Garmine Kande para incorporar un parcial de 7-0 al marcador y acabar con esa igualdad inicial, obligando a Jordi Juste a parar el partido con 1:33 para finalizar el cuarto (14-20).
Los pupilos de Diego Ocampo supieron mantener la renta para finalizar el primer acto con una ligera ventaja de 20 a 25.
Tras el parón, el Basket Navarra avisó de sus intenciones con un gran triple de Lobaco que devolvía la igualdad en la reanudación (23-25). Sin embargo, el Tizona Universidad de Burgos fortaleció su defensa, consiguiendo ahogar el ataque local y sumando un nuevo parcial 9-0 en poco más de un minuto que colocaba a los azulones por delante en el marcador en lo que fue la ventaja máxima del partido (23-34) a falta de ocho minutos para el descanso.
Pese al duro golpe recibido, los navarros encontraron el talón de Aquiles del Tizona y con dos triples consecutivos de Ander Urdiain y Pau Treviño devolvía la intensidad al partido (29-34).
Peter Stümer buscaba dar tranquilidad a los de Ocampo con un triple certero, pero el técnico burgalesista paraba el partido poco después al tener ciertas dudas por el devenir del partido (31-37) con 4:13 en el cronómetro.
Con un nuevo parcial favorable, en esta ocasión de 5-0, el Basket Navarra imprimía cierta presión sobre los castellanos que perderían la ventaja a falta de 2:10 con un buen triple de Iñaki Ordoñez que devolvía las tablas (40-40). Cremo, Fercho y dos tiempos muertos, uno para cada equipo, maquillaban el marcador al empate a cuarenta y cuatro con el que se llegó al intermedio.
El paso por vestuarios dejaba un partido totalmente nuevo, igualado y con dos equipos con mucho hambre de victoria, por lo que el espectáculo baloncestístico estaba servido.
Joe Cremo anotaba desde el exterior después de más de un minuto y medio sin canastas. La concentración era clave y los errores se podían pagar demasiado caro en un partido sumamente igualado. Dídac se echaba el equipo a su espalda para, con distintas individualidades devolver los siete puntos de ventaja al Tizona (50-57).
Los pamploneses seguían aprovechando el tiro exterior para mantener la pugna por el partido y con Iñaki Ordoñez y Pau Treviño mantener el partido igualado (58-61), llegando a los últimos diez minutos de juego con el partido totalmente abierto (64-66).
El desgaste físico era claro y la intensidad dejaba muchas faltas sancionadas en ambos conjuntos. Además, en una jugada desafortunada, Dídac Cuevas se resintió en su rodilla, dejando al Tizona sin uno de sus estandartes durante varios minutos.
Pese a los inconvenientes y la presión ejercida por Balastegui desde el triple, que daba la vuelta al marcador pasado el primer minuto y medio del cuarto (69-68), el Tizona se rehízo. Ayoze Alonso mantenía el intercambio de puntos hasta la reincorporación del base catalán.
Dídac Cuevas volvía a pista para rebajar la gravedad de su lesión y, con otro nuevo triple, volvía a obligar a Jordi Juste a pedir tiempo muerto (71-75).
En esta ocasión, las instrucciones del técnico local no fueron efectiva y el parcial azulón ascendió hasta el 10-0 que prácticamente sentenciaba el partido (71-80), aunque aún restaban cuatro minutos para el final del partido.
Ander Urdiain forzaba un 2+1 para la esperanza navarra, pero Joe Cremo no erraba desde el exterior para mantener la renta. La tensión era patente en pista y en la presión que ejercía Arrosadía que intentaba alentar a los suyos hasta el final.
Sin embargo, la veteranía burgalesa y los errores de los de Juste que buscaban contrarreloj la remontada, favorecieron a un Tizona que supo jugar con el reloj para sumar la decimotercera victoria de la temporada.
Un nuevo triunfo en un arranque de 2023 cargado de partidos, siendo este próximo miércoles el siguiente encuentro ante el Zamora Enamora en El Plantío a partir de las 20 horas y finalizando la semana en Algeciras el próximo domingo a las 12 de la mañana.
DATOS DEL PARTIDO:
ENERPARKING BASKET NAVARRA: Adrià Rodríguez (4), Pau Treviño (8), Fercho Fernández (11), Ander Urdiain (23) y David Kristensen (7). También jugaron: Ezequiel Herrera (6), Javier Balastegui (6), Iñaki Ordoñez (11) H. Jiménez (-) y Raúl Lobaco (6). Entrenador: Jordi Juste.
TIZONA UNIVERSIDAD DE BURGOS: Dídac Cuevas (20), Joe Cremo (16), Rodrigo Seoane (-), Papi Diene (2) y Abdou Thiam (8). También jugaron: Peter Stümer (9), Ale Bortolussi (7), David Gómez (-), Totte Alonso (3), Garmine Kande (9) y Ayoze Alonso (16). Entrenador: Diego Ocampo.
Parciales: 20-25 / 24-19 (44-44) / 20-22 (64-66) / 18-24 (82-90)